Vivimos rodeados de códigos y símbolos que comunican. Algunos sistemas, como el lenguaje o el diseño gráfico y de espacios, los manejamos a la perfección. Sin embargo, otros como el marketing olfativo, por ejemplo, aún no los hemos llegado a dominar al 100%. Pero estamos en ello. Y la gastronomía es uno de estos sistemas de códigos que, manejado con conocimiento de causa, puede convertirse en una herramienta poderosísima de marketing para una marca. Por eso, nuestro tema de hoy vuelve a ser el catering para eventos o cómo conectar con los públicos a través de la gastronomía.
No nos cansamos de repetir que no hay recetas de éxito asegurado. Cada caso es único y debe manejarse en función de sus peculiaridades y circunstancias. Y sin embargo, vamos a intentar ofrecerte una lista de tips genéricos que, como organizador de eventos, debes tener en cuenta a la hora de diseñar una experiencia gastronómica única para tu público.
Inspírate
Antes que nada, busca referencias tanto de eventos donde el catering ofrecido te llame la atención, como de empresas de catering con una oferta diferencial. Da igual el tamaño del evento o el segmento y tipo de proveedor. La inspiración puede venir de cualquier detalle por muy insignificante que te pueda parecer al principio. Y a partir de allí, solo es cuestión hacer un buen análisis y match entre las sensaciones que quieres transmitir con tu evento y la oferta que hayas encontrado. Pero hay una cosa más, no determinante, pero desde luego a tener en cuenta, que nos lleva al siguiente punto…
Analiza tu público
La mala noticia es que todos tenemos gustos diferentes. La buena es que tú como marca a nivel de catering que ofreces en tu evento no debes satisfacer al 100% el gusto de todos. Es más cuestión de equilibrio entre los valores que necesitas transmitir a través de sabores y de una estética que mejor concuerde con el concepto de tu evento y los gustos generales del público.
Y por concepto en este caso se entiende el efecto general que se pretende crear. ¿Modernidad o tradición? ¿Sencillez o complejidad? ¿Quizás, algún toque internacional o regional? Todos estos detalles suman a la experiencia final unos matices distintivos que pueden convertir tu evento en algo más memorable todavía.
Y si te da respeto demasiada experimentación gastronómica, siempre puedes introducir en el catering clásicos infalibles de la gastronomía nacional que han funcionado, funcionan y, afortunadamente, seguirán funcionando. Porque nos gustan, y punto.
Elige bien el formato
En este punto nos referimos a algo bastante obvio, pero en lo que a veces se cometen fallos de principiante difíciles de explicar. Se trata del formato del catering. ¿Sentados o de pie, plato o canapé, autoservicio o servicio de mesa…? ¿O de pronto, un food truck? Para elegir bien el formato siempre tienes que pensar en el ritmo del evento y en el protocolo que lo rige.
Eventos más lentos y ceremoniosos, con un determinado código de vestimenta, tienden a formatos más pausados y reglamentados. Eventos más dinámicos, en cambio, permiten una mayor libertad. No nos olvidemos de que nuestro tema es “Catering para eventos: cómo conectar con los públicos”. Y para conectar, la gente tiene que estar cómoda y en armonía con el entorno, en contenido y forma.
Sé sostenible
Afortunadamente, es algo que el público valora e, incluso, demanda cada vez más. Decimos ‘afortunadamente’, porque la gratitud con la que el discurso sostenible es recibido por un público cada vez más concienciado, nos permite a nosotros, como grandes defensores de la aplicación de los criterios sostenibles a la organización de eventos, acallar las voces críticas que intentan pintar de ‘greenwashing’ un movimiento genuino y muy positivo para todos nosotros.
Y acuérdate de que a nivel de catering se pueden trabajar los tres pilares de la acción sostenible a la vez. Porque no solo se trata de reducir los envases de un solo uso, sino además apostar por la economía circular y producto de proximidad, y además crear oportunidades laborales para colectivos vulnerables.
Y por último, deja que los profesionales hagan su trabajo. Está muy bien participar en todas las fases del proceso, velar por que se comunique bien el mensaje que quieres transmitir, y pulir cada detalle. Pero también es importante dejarse llevar por las sugerencias y fiarse de propuestas que funcionan.
